Finalmente el destino me ha regalado el privilegio de conocer a Jodorowsky en persona, como todos sabeis, es cuando el alumno esta preparado, que encuentra al maestro. Y este era el momento. Me ha iniciado en el arte de ver, en el trabajo del descubrimiento, de la conciencia, eso es el tarot.
Han sido dos días intensos llenos de descubrimientos.
Me ha abierto los ojos, un caso en el que Jodo recomendaba absolutamente lo contrario que yo habría hecho, no actuar.
Algunas veces queremos ayudar ya que nuestra naturaleza fuerte esta habituada hacerse cargo de las situaciones difíciles. Pero puede ser que el destinatario de la ayuda, no quiera recibirla para no sentirse en deuda con nosotros. En este momento, debemos dejarle. No actuar.
Pero para los que necesitéis ayuda y no sabéis recibirla o no creáis que la podéis recibir, os propongo un pequeño acto de psicomagia, para aprender a recibir ayuda.
En un lugar donde seáis anónimos, os ponéis unas gafas negras y un bastón de ciego. Os pasáis una mañana en la calle pidiendo ayuda para cruzar la calle. Os daréis cuenta de la cantidad de gente que esta dispuesta a ayudaros, sin pedir nada a cambio.
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